Úsese sólo por indicación y bajo supervisión médica. Este medicamento no debe administrarse a menores de 18 años, excepto que sea para un tratamiento de enuresis, el cual debe ser por un breve período. Se ha visto que el uso de antidepresivos en niños y adolescentes aumenta el riesgo de pensamientos y conductas suicidas. Adoptar precauciones especiales en pacientes de edad, principalmente en aquellos con patología cardiovascular, hipertrofia prostática o glaucoma. En los niños se debe considerar la posibilidad de dejar intervalos sin medicación después de algunos días de tratamiento. Es posible que los niños que han sufrido recaídas no respondan cuando se inicia el tratamiento: Imipramina puede producir somnolencia. Evitar la ingesta de bebidas alcohólicas, dado que se potencia el efecto depresor sobre el SNC.
El uso de este medicamento puede producir algunos efectos que normalmente no requieren atención médica: somnolencia, cansancio y dificultad de concentración. Como consecuencia de la acción farmacológica propia de la Imipramina, se producen habitualmente sequedad de la boca y gusto metálico, estreñimiento y alteraciones visuales. Si se presentan algunas de las siguientes reacciones adversas mientras esté en tratamiento con este producto acuda a su médico: Alteraciones del sistema cardiovascular, palpitaciones o arritmias. A nivel del Sistema Nervioso Central, en algunos pacientes se puede producir una transición más o menos brusca del estado de depresión al estado de manía. Pacientes de edad avanzada, sobre 50 años tienen reacciones de tipo confusional, desorientación y en algunos casos hay delirio. También en estos pacientes se puede presentar temblor fino.